La historiografía liberal argentina, ha decidido qué lugar
debía ocupar cada protagonista del pasado en su propia interpretación del
pasado nacional. Para ello, han recurrido a todo tipo de tergiversaciones,
manipulaciones, falsedades y procesos de selección temática muy particular. Quizás
el paradigma de la manipulación en términos historiográficos sea José
Hernández, al que se redujo al exclusivo papel de autor del mítico Martín
Fierro.
José Hernández nació el 10 de noviembre de 1834 en San
Martín, provincia de Buenos Aires. En 1857 se instaló en Paraná, que por
aquella época era la capital de la Confederación Argentina liderada por Justo
José de Urquiza.
En Entre Ríos, José comenzó su activa militancia política en
el bando federal. Por aquellos años, la Argentina estaba dividida. Por un lado,
la totalidad de las provincias, que habían ratificado en San Nicolás, su
voluntad para organizarse bajo la forma republicana y federal. Por el otro, el
mitrismo gobernante en Buenos Aires, que había segregado a la provincia
poseedora del puerto, descontenta con las pretensiones provinciales de ponerse
a la misma altura que la otrora capital.
En este contexto de gran conflictividad, José Hernández fue
un férreo defensor del federalismo, no sólo desde las páginas de los diarios
para los que colaboraba sino, también, desde los campos de batalla en los que
estuvo. Junto a Urquiza combatió en Cepeda (1859) y Pavón (1861).
Luego de la derrota de Pavón y de la traición de Urquiza
para el bando federal, José siguió militando junto a Ricardo López Jordán,
quien mantuvo vigente la resistencia contra los gobiernos genocidas de
Bartolomé Mitre y Domingo Sarmiento. Luego de la derrota de 1871, Hernández, al
igual que muchos otros argentinos, debieron emigrar al Brasil.
A su regreso, comenzó una actividad político que lo llevará
a ser diputado y senador por la provincia de Buenos Aires. En el ámbito legislativo,
defendió la federalización de la ciudad de Buenos Aires, para que se
constituida en Capital Federal de la República.
Fue justamente en estos años, en los cuales José escribió la
mayor obra de la literatura gauchesca, el Gaucho Martín Fierro, que se publicó,
en formato de fascículos, a partir de noviembre de 1872 en el diario La
República. El texto se transformó en una obra de consumo bastante masivo para
la época, tanto como para que en 1879 José publicará una segunda parte,
denominada la Vuelta de Martín Fierro.
Pablo Camogli